sábado, diciembre 10, 2005

Malos Olores en plantas de celulosa

En al revista lignum, en linea aparece una noticia relevante para el mejoramiento de las condiciones ambientales en que nos encontramos todos los que estamos conviviendo cerca de la planta de celulosa de Arauco y otras. En un proyecto innovador se pretende eliminar los malos olores que están presentes en el proceso de producción de la celulosa. Recuerdo cuando realizaba el Diplomado de análisis y gestión ambiental en el centro EULA el año 1997, el Director de Conama Don Bolivar Ruiz en una de sus clases manifestó que la planta de Arauco no expelía malos olores. Junto a una compañera que viajaba desde Cañete , refutamos su planteamiento ya que hasta el día de hoy quiénes pasamos por la carretera podemos sentir el fuerte olor, cosa que al parecer y debido a los esfuerzos académicos que se están desplegando en mejorar el proceso con respeto al medio ambiente podemos esperanzarnos en que este factor será cosa del pasado si la industria lo incorpora. Quedando otros aspectos a mejorar. Por lo cuál considero que debemos invitar a la empresa en tomar este rumbo y apoyar a ésta, por todos los impactos positivos(inversiones, apoyo, educación, y especialmente trabajo).
Finalmemte les entrego todo la noticia para su lectura.

Proyecto en Centro de Biotecnología:
Una solución para malos olores de celulosas y petroquímicas Equipo encabezado por docentes de la UdeC y de la UC de Valparaíso desarrollará sistema de biofiltros para degradar los compuestos sulfurados responsables de los molestos olores. Se imagina pasar junto a cualquiera de las plantas de celulosa de nuestra región y no sentir olor alguno? Esto podría lograrse con la ayuda de algunas bacterias. En el Centro de Biotecnología ubicado en la Universidad de Concepción, un innovador proyecto avanza a pasos agigantados. La idea consiste en eliminar totalmente los olores de las plantas de celulosa y petroquímicas mediante biofiltros, un sistema que se usa en algunas industrias pero jamás se ha aplicado en estos procesos."Estamos creando una tecnología que no existe", afirma el doctor en Ingeniería Bioquímica, Germán Aroca Arcaya, académico de la Universidad Católica de Valparaíso e investigador principal del proyecto, en el que trabaja junto al doctor en Ciencias Ambientales, Homero Urrutia Briones, de la Universidad de Concepción.El proyecto "Biofiltración de gases sulfurados reducidos a través de reactores de biopelícula conectados en serie" cuenta con el financiamiento de Fondecyt y se espera esté concluido en marzo de 2008, tras 36 meses de investigación.Según Aroca, quien lleva cinco años trabajando en investigación sobre este tema, el objetivo de este proyecto es tratar los compuestos sulfurados reducidos o TRS (por sus siglas en inglés), que son responsables del mal olor y se producen en la producción de celulosa Kraft y en la refinación de petróleo.Algunos de los compuestos volátiles poseen un umbral de detección olfativo extremadamente bajo, por lo que su efecto puede abarcar grandes extensiones y ser percibido muy lejos del foco emisor afectando en forma importante la calidad de vida de las poblaciones cercanas a las instalaciones industriales. Entre los principales causantes del mal olor se encuentran los compuestos sulfurados reducidos (gases TRS) como el sulfuro de hidrógeno (H2S), el metil mercaptano (MM), el dimetil sulfuro (DMS) y el dimetil disulfuro (DMDS), explican los investigadores.Por ello, la autoridad emitió en 1999 el decreto Nº167/99 que regula las emisiones de gases TRS desde fábricas de celulosa, lo que refleja la preocupación por el problema. En opinión de los investigadores, la tendencia va hacia mayores restricciones en temas ambientales. Se prevé que en el corto plazo se establezcan normas para otras industrias, lo que obliga a disponer de soluciones técnicamente factibles y de bajo costo.Según los profesionales, los sistemas que se aplican actualmente son químicos y si bien reducen notablemente los olores, no se logra el cien por ciento, pues llegar a eso implica un elevadísimo costo.Fuente: Diario El Sur